Educación redonda en Bormujos

Una Educación redonda es aquella que está en movimiento, como una rueda de emociones. Redonda también porque da paso a todos los miembros de la Comunidad Educativa. Pone en marcha al profesorado, a los estudiantes, a las familias y a la sociedad en general. En ese círculo vital estamos para ayudarnos, para movernos en el mismo sentido todos, porque si no, se paraliza. 

En el mes de abril de este 2018 hemos tenido la oportunidad de aprender en los institutos de Bormujos, (Sevilla). Mi socio, Mateo Zamorano y yo nos hemos puesto manos a la obra para impartir talleres de Comunicación Positiva a casi 400 alumnos.

Experiencia espectacular

Tenemos grabada en la cámara de la memoria, sus sonrisas, su participación, su entusiasmo y sus dudas. Mano muy levantada al cielo para hablar:

“Seño es que yo no tengo ningún talento”.

Ante esta afirmación que aparece en muchos de nuestros cursos, deberían saltar todas las alarmas educativas y sociales, manifestaciones incluso, no bromeo y mucho menos ironizo. Todo ser humano viene a este planeta, crea en la religión que crea, repleto de virtudes, habilidades y talentos, lo que pasa es que uno destaca por encima de los demás, es lo que llamamos el Don Principal. Ese a veces, es tan visible que entendemos que se ha escondido, no puede ser tan fácil.

Dentro de las muchas asignaturas pendientes que nos faltan en los sistemas educativos actuales, no sólo está la carencia de hablar en público. También hacerlo en positivo, es decir, poniendo a la persona en acción, en marcha hacia su Talento.

Muchos nos han preguntado estos días en los institutos de Bormujos:

¿qué tiene que ver la expresión oral con la Comunicación Positiva?

El vínculo es poderoso y al mismo tiempo redondo, aprender a hablar adecuadamente ¿va en primer lugar o en segundo después de expresarnos en positivo? Mateo y yo entendemos que es un ‘tótum revolútum’ (todo revuelto divertidamente). Se supone que sabemos hablar, andar y respirar… ¿y si no caminamos de la mejor forma posible? ¿Y si respiramos de manera entrecortada sin nutrir suficientemente nuestro cuerpo por estrés? ¿Y si aún no hemos aprendido a usar nuestras verdaderas palabras, las que nos van a dar poder, acción y hasta salud?

Regresando a la duda de la alumna, pongamos que se llama ‘Sofía’:

“de verdad que yo no veo que tenga ningún talento, soy bastante torpe…”

Ahí vienen las palabras asesinas, las ‘killer’ como dice el investigador Luis Castellanos. “Yo soy lenta, yo tonto, yo soy aburrida, inútil, bocazas y hasta vago”. Insistimos en la esencia: ¡¡Nos hablamos bien por favor!! Nos hablamos bien a nosotros mismos, para después hablarle bien al otro, al compañero, al docente, a la madre, al padre, al hermano, a la pareja, al amigo, a la naturaleza, a la sociedad…

Resulta que nuestra protagonista, la que hemos llamado ‘Sofía’, tiene talento para bailar. En la dinámica de las profesiones, un juego que despierta los sentidos, comprobamos que esa pasión tiene futuro y presente, aunque venga con la creencia limitante de:

“es que bailar no tiene salida”.

Nuestra sonrisa se cruza con su preocupación y respondemos:

“ah, puede que sea mejor buscar una carrera con entrada, porque digo yo que antes habrá que acceder, después si quieres salimos”.

La falta de Talento Principal de ‘Sofía’ se convierte en numerosas soluciones de sus compañeros: “puede montar una academia de baile para niños pequeños, diseñar coreografías, abrir un canal de youtube de danza, mostrar sus pasos en televisión, hasta tener una tienda de ropa específica para bailarines y bailaores…”.

Los límites en la mayoría de los casos, son mentales, barreras que nos dejan sin palabras positivas, sin una verdadera Comunicación.

Es vital contar con una Orientación Profesional. Centrarnos en las soluciones, no en los problemas.

 

En abril y en estos primeros días de mayo, hemos recibido el regalo de casi 400 jóvenes. Estos adolescentes nos han mirado a los ojos, nos han escuchado, nos han seguido a jugar sin miedos y nos han entregado sus palabras:

“risueño, imaginativa, soñador, divertido, alegre, feliz, simpático, ordenado, artístico, diferente, colorido, amistoso, agradecida, educado, agradable, condescendiente, empática, entusiasta, original, sociable, potente, poderosa, resiliente, perseverante, ADELANTEEE…”.

¡¡Gracias chic@s!!

Claro, esta oportunidad de compartir herramientas de Comunicación Positiva, se hace en redondo, en equipo. Sin el apoyo del profesorado atrevido a jugar, sin las madres y los padres valientes que han acudido a los talleres, la rueda, no se mueve.

Gracias a cada uno de los docentes, que pone el alma cada día en su trabajo. Una profesión de las que denominamos ‘calentitas’, se exponen a un aumento de críticas, sugerencias y presiones ‘casi’ diarias.

Gracias familias, por acudir con una mente abierta a cuidar las palabras que nos decimos y compartimos con nuestros hijos.

Gracias a los técnicos del ayuntamiento de Bormujos que han plasmado un proyecto en realidad en los institutos Juan Ciudad Duarte y en Los Álamos.

Gracias Equipazo por recordarnos que los caminos vitales a veces llevan más curvas que rectas y, aún así, te permiten llegar a una meta disfrutando del paseo.

Gracias a la Delegación de Juventud de este municipio sevillano pionero en ‘Motivar Talentos’.

Con estos talleres de Comunicación Positiva mantenemos el Movimiento de la rueda, potenciamos el Movimiento de una verdadera Educación Positiva.

P.D. Recordad que todos tenemos una varita mágica, no es la de Harry Potter, es la nuestra, es sencilla, sólo hay que usarla a diario, porque si acudimos sólo un día al gimnasio, al final acabamos con agujetas. Para correr la maratón es necesario entrenar con perseverancia, con: ¡¡PRÁCTICA, PRÁCTICA, PRÁCTICA!!